Los Dementores son seres horrorosos de gran estatura, cubiertos
por una capa de color negro, tienen cierta semejanza a los seres humanos, ya
que tienen cuerpos parecidos al de una persona, pero su rostro no está
definido, donde deberían encontrarse sus ojos hay una especie de membrana y su
boca es un orificio abierto. Tienen la capacidad de volar y su apariencia es
putrefacta. Son temidos por los magos y brujas porque se alimentan de la felicidad
y los recuerdos alegres de las personas, dejando solo la tristeza y la
desolación. Asimismo, cuando están cerca producen un gran frío. Sus caras están
ocultas por una capucha que sólo se quitan al dar el famoso "Beso del
Dementor ". Es por medio de este “beso”
que pueden quitar el alma de las personas, aquellos que han perdido su alma por
un Dementor quedan como una concha vacía.
En teoría, los Dementores sólo pueden desplazarse a otro lugar que no sea
Azkaban con una orden del Ministerio de Magia. Pero, en realidad los Dementores
sirven a quienes sean capaces de proporcionarles una mayor cantidad de personas
con recuerdos felices que ellos puedan devorar. Para ahuyentar a un Dementor se
utiliza el Encantamiento Patronus.
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